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A03 |
medicina rural
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En Ilarregi había otra mujer curandera, Maria Ezkurra. Ésta arreglaba los huesos. De joven se fue a América y estuvo como criada de un curandero de allí. Una vez que no estaba el señor, fue un paciente y le dijo a la chica que le hiciera ella lo que supiera.
Vino aquí con el marido y ella empezó a hacerlo aquí. La gente iba a donde ella. Los médicos la llevaron a juicio, pero superó el examen que le pusieron los médicos, por lo que además de ganar el juicio ganó también el derecho a seguir trabajando.
Al cura José Castillo, le curaron mal el brazo y la curandera de Ilarregi se lo puso bien. |